Signos de alerta de Disfagia: Cuándo consultar a un logopeda
La disfagia o dificultad para tragar alimentos y líquidos es un síntoma frecuente que puede pasar desapercibido en sus fases iniciales. Sin embargo, reconocer sus signos de alerta a tiempo es esencial para prevenir complicaciones como neumonía por aspiración, desnutrición o deshidratación.
Según las revisiones más recientes (Warnecke et al., 2020; Thiyagalingam et al., 2021; Yang & Pan, 2022), la disfagia puede deberse a causas neurológicas, estructurales o funcionales, y su manifestación varía según el tipo de paciente y la enfermedad de base.
Disfagia en pacientes neurológicos
En personas con enfermedades neurológicas como accidente cerebrovascular, Parkinson o esclerosis lateral amiotrófica la deglución se ve alterada por cambios en la coordinación y fuerza muscular. Los signos de alarma más comunes son:
- • Tos o atragantamientos frecuentes al comer o beber.
- • Voz húmeda o con gorgoteo después de tragar.
- • Restos de comida en boca o garganta tras la deglución.
- • Sensación de que el alimento "se queda pegado".
- • Pérdida de peso involuntaria o fatiga al comer.
Estudios recientes muestran que hasta un 65% de los pacientes con ictus agudo presentan algún grado de disfagia, lo que refuerza la necesidad de una valoración temprana por parte del logopeda clínico o del equipo de neurorehabilitación.
Disfagia en adultos mayores
El envejecimiento natural implica cambios en la masticación y la coordinación de los músculos faríngeos. Sin embargo, cuando estos cambios afectan la alimentación o la seguridad al tragar, es importante no normalizarlos. Los signos más frecuentes son:
- • Dificultad para tragar ciertos alimentos, especialmente sólidos.
- • Tos o ahogo durante las comidas.
- • Infecciones respiratorias repetidas o neumonías por aspiración. Febrícula.
- • Deshidratación o pérdida de peso súbita.
- • Necesidad de más tiempo para terminar una comida.
Considerando la evidencia más reciente (Thiyagalingam et al., 2021; Adkins et al., 2020) destaca que la disfagia en adultos mayores está subdiagnosticada y puede ser reversible con una intervención logopédica temprana.
Factores de riesgo y cuándo consultar
Algunos factores aumentan el riesgo de desarrollar disfagia:
- • Edad avanzada o fragilidad.
- • Enfermedades neurológicas o lesiones de tronco encefálico.
- • Hipertensión, diabetes o enfermedades gastrointestinales.
- • Uso de fármacos que alteran la salivación o la coordinación muscular.
Si el paciente utiliza maniobras compensatorias como, beber agua para empujar el bocado o evitar ciertos alimentos por miedo a atragantarse es momento de consultar. La evaluación logopédica puede incluir exploración clínica y estudios instrumentales como videofluoroscopia o evaluación endoscópica de la deglución.
Cuidar la deglución mejora la calidad de vida
Los avances en rehabilitación logopédica, junto al abordaje médico interdisciplinar, han demostrado una mejora significativa en la seguridad de la deglución y en la calidad de vida de los pacientes (Warnecke et al., 2020; Yang & Pan, 2022).
Detectar a tiempo los signos de disfagia no solo previene complicaciones graves, sino que favorece una recuperación funcional y un envejecimiento más saludable.
En Clínicas Áurea, nuestros profesionales especializados en neurologopedia valoran de forma integral cada caso, diseñando planes de reeducación de la deglución personalizados, seguros y basados en la evidencia científica más actual.
Si crees que tú o un familiar presenta estas dificultades, puedes agendar tu primera sesión gratuita y sin compromiso.
Conoce más de cerca a Marcelo Rodríguez

Durante más de 18 años de experiencia en logopedia, me he dedicado a la evaluación y tratamiento de trastornos del lenguaje, voz, motricidad orofacial y deglución, tanto en niños como en adultos.
Actualmente, en Clínicas Áurea, aporto mi experiencia en intervención neurocognitiva y rehabilitación logopédica, trabajando dentro de un equipo de profesionales que ofrece un abordaje personalizado y que ayude a brindar calidad de vida, apoyándome en el saber técnico y un enfoque humano, calido, familiar ajustado a las necesidades de cada persona que me consulta.
Fuentes mencionadas
Warnecke, T., Labeit, B., Schroeder, J., Reckels, A., Ahring, S., Lapa, S., Claus, I., Muhle, P., Suntrup-Krueger, S., & Dziewas, R. (2020). Neurogenic Dysphagia. *Neurology*, 96, e876 - e889. https://doi.org/10.1007/978-3-030-42140-3
Thiyagalingam, S., Kulinski, A., Thorsteinsdottir, B., Shindelar, K., & Takahashi, P. (2021). Dysphagia in Older Adults.. *Mayo Clinic proceedings*, 96 2, 488-497. https://doi.org/10.1016/j.mayocp.2020.08.001
Ng, K., Jones, R., Hernandez, E., Macrae, P., & Huckabee, M. (2020). Classification of stroke patients with dysphagia into subgroups based on patterns of submental muscle strength and skill impairment.. *Archives of physical medicine and rehabilitation*. https://doi.org/10.1016/j.apmr.2020.11.014
Adkins, C., Takakura, W., Spiegel, B., Lu, M., Vera‐Llonch, M., Williams, J., & Almario, C. (2020). Prevalence and Characteristics of Dysphagia Based on a Population-Based Survey.. *Clinical gastroenterology and hepatology : the official clinical practice journal of the American Gastroenterological Association*. https://doi.org/10.1016/j.cgh.2019.10.029
Yang, C., & Pan, Y. (2022). Risk factors of dysphagia in patients with ischemic stroke: A meta-analysis and systematic review. *PLoS ONE*, 17. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0270096
Dejar un comentario Cancelar comentario